
Y ya para ir terminando con el esperpento visual de windows 8, resulta que a alguien se le ocurre la magnífica idea de suprimir el botón inicio de toda la vida.
Aunque yo creo que en el primer service pack que saquen lo volverán a habilitar (lo cierto es que da una sensación rara y de deshubicación de donde se encuentran las opciones y los programas, a la vez que obliga a realizar más clicks para las opciones que antes estaban mucho más accesibles), mientras tanto podemos usar la siguiente solución: